El pasado miércoles dos barrios se unieron para entregarse con la Santísima Virgen en su advocación de Mayor Dolor en oraciones y plegarias, en el Piadoso Ejercicio del Vía Matris.

Anteriormente a la celebración de este acto externo por parte de la junta de gobierno de la Hermandad de Penitencia del Santísimo Cristo del Abandono y Nuestra Señora del Mayor Dolor, fueron los niños de catequesis que durante las tardes de los días 13 y 14 del corriente hacían entrega de flores en el mes de María a la Santísima Virgen.

Ya por la tarde, a las 19.00 horas y desde la Parroquia del Sagrado Corazón de Jesús partía el cortejo, abriendo el mismo la Cruz Parroquial y faroles de acompañamiento, tras ellos varios tramos de hermanos con cirios, el Estandarte del Grupo Joven y el Estandarte Corporativo de la Hermandad, miembros de la junta de gobierno y representante del Consejo Local de Hermandades y Cofradías junto al Director Espiritual de la Hermandad y cerrando el cortejo el cuerpo de acólitos.

El paso de la Virgen del Mayor Dolor era portado por la cuadrilla de costaleros, estando al frente de la misma José Luis López Arenillas y Juan Carlos Lucena Barranco.

El itinerario previsto por la junta de gobierno para el Traslado de la Sagrada Imagen hasta la Plaza del Padre Arnaíz donde se celebró la Santa Misa, transcurrió por las calles Purisima Concepción, Torres Quevedo, Saavedra Fajardo y Cardenal Cisneros.

Junto a la fachada de la Capilla de San Miguel en el Barrio de La Colonia se encontraba el altar de celebración de la Eucaristía y a su lado se estableció las andas procesionales con Nuestra Señora del Mayor Dolor, enfrente y en el centro de la Plaza del Padre Arnaíz la feligresía se ubicaba en los bancos del Templo sacados para esta ocasión.

Durante todo el recorrido estuvo acompañada la Virgen de sus hermanos y devotos que tras la finalización de la Santa Misa y ya de regreso a su residencia canónica celebraron el Piadoso Ejercicio del Vía Matris, meditando los dolores de la Virgen María, Madre y cooperadora del Divino Salvador, que sufrió durante su vida, en el cumplimiento de su misión.

El itinerario de regreso al Templo del Sagrado Corazón discurrió por las calles Diaz Delgado, Francisco de Vitoria, Saavedra Fajardo, Torres Quevedo, Virgen del Rosario y Purisima Concepción.

Galería de Imágenes de Alfredo Jesús Sánchez Toro, Ildefonso Pérez López y La Línea Cofrade,