Un año mas y como de costumbre una de las Hermandades de Gloria de nuestra ciudad, concretamente la de Nuestra Señora del Rocío, comprendidos entre los días 18,19,y 20 del presente mes de Abril iba a celebrar su tradicional Triduo a su titular.

La Línea Cofrade quiso estar presente en el último día de la celebración de los cultos a la Reina de Almonte, cuyo acto y como estaba previsto daba comienzo a las 21:00 horas de la tarde-noche donde minutos antes y con la intención de animar el ambiente, en el atrio del Santuario se daba cita la Escuela de Tamborileros de dicha Hermandad, para un acto que iba a ser presidido por el Reverendo Padre D. José Antonio Omis párroco de la Iglesia de San Sebastian de Huelva, donde el mismo en el transcurso de la Eucaristía fue el encargado de bendecir las medallas que serian impuestas a los nuevos Hermanos aproximadamente unos noventa.

Acto seguido, juraron los cargos el Hermano Mayor y su respectiva Junta de Gobierno seguidamente el resto de los Hermanos, en una misa que seria amenizada por un renovado y numeroso Coro de la propia Hermandad, que como todos sabemos tendrán una importante participación en el próximo Rosario de Almonte.

Como de costumbre, a la finalización de la Eucaristía y abrigados por la ténua luz de los cirios que alumbraban el Simpecado, todos los Hermanos allí presente se disponían a cantar la tradicional Salve Rociera.

Una vez finalizados estos tres intensos días de Triduo que son la antesala al Camino 2013 de los Rocieros Linenses, a medio día de la mañana Dominical pasadas las 13:30 horas daba comienzo el XXXV Pregón Rociero con un gran número de asistentes.

Este año el Pregón, correría a cargo de D. José Manuel Pérez pregonero oficial de la Hermandad Matriz de Almonte y que vendría acompañado de algunos de los miembros que componen su Junta de Gobierno.

La encargada para la ocasión en lo que a la presentación del Pregonero se refiere, correría a cargo de su propia hija Doña Ana Rocío Pérez Villalta que emocionada no escatimaba en palabras de elogios hacía su padre y que momentos después tras un emotivo abrazo con el, daba paso a este para que comenzara con su Pregón.

Un Pregón lleno de emoción y sentimientos a la Reina de las Marismas y a su vez amenizado por dos excelentes tamborileros pertenecientes también a la Hermandad Matriz de Almonte, donde la Hermandad y el Pueblo Linense estuvieron presentes en la pluma del pregonero, donde cabe destacar algunas excelentes pinceladas en las que recalcaba que “Ser Rociero es algo mas que colgarse una medalla y hacer el camino hasta encontrarse con la Blanca Paloma…” pidiendo con ello para acordarse de las necesidades de muchos de los Hermanos y no hermanos que sufren al verse en una situación tan desfavorecida, saliendo de su boca y como se suele decir autenticas verdades como puños para culminar un Pregón con una bella frase a cualquier niño/a que viniera a nacer “…antes de decir Mamá, aprende a decir Rocío” con todo el público presente en pie.