El Complejo Mundo de las Notas.

El pasado domingo 6 de Noviembre, muchos de los cofrades y grandes melómanos de la música sacra pudieron disfrutar de un formidable certamen de bandas, tanto de cornetas y tambores como agrupaciones musicales, en el Parque de Los Príncipes en el Hispalense barrio de Los Remedios. Por las tablas de dicho certamen desfilaron algunas de las más prestigiosas y celebérrimas, así como de mayor calidad musical, corporaciones  del panorama cofrade, tales como Tres Caídas de Triana, Sol, Redención… y algunas menos conocidas   pero de igual valor musical como la banda de CCTT Cristo de la Sangre o Madre de Dios de los Desamparados.

Después de que en este evento quedara palpable la grandeza y la brillantez con la que algunas manos privilegiadas tocan los diversos instrumentos , que mas que tocarlos parece que los acarician con tal delicadeza como si fuera un susurro en el viento, al mismo tiempo, que los sentidos se embriagaban  ante la magnificencia de esas composiciones corales, una reflexión sobrevino sobre mi persona…quería saber cuál era el estado de salud musical del que gozaba nuestra ciudad y de esto es de  lo que trataré de hablar en las próximas líneas .

Primeramente,  y antes de ahondar en el tema de la partitura, me gustaría saber porque determinadas hermandades van dando saltos de un estilo a otro , tanto en el andar como en el acompañamiento musical, o porque directamente algunas hermandades se han afincado en un estilo que no congenia con la escena de la pasión que su titular representa. Yo, personalmente, he sido testigo directo del primer ejemplo expuesto con anterioridad  en mi querida Hdad. de Oración, con esto no digo que el cambio realizado desde la salida extraordinaria sea peor o mejor , si no que reivindico la necesidad imperiosa de otorgar estabilidad a una propuesta musical concreta, para que poco a poco con el paso del tiempo , pase a formar parte intrínseca del ADN de la hermandad, y será en ese momento cuando podamos afirmar, que esa determinada Hdad. ya ha llevado a su terreno un estilo concreto.

Del tema de no encontrar un estilo que se adapte a la iconografía de una imagen , solo voy a hacer un pequeño recordatorio, “los crucificados andan siempre de frente” y , es más , voy a declararme admirador de los pasos que andan de frente con valentía y poderío, porque como dijo un amigo mío, “no hay cosas mas bonita que ver un paso andando por derecho , de frente” y con esto no quiero decir que no me gusten los pasos que anden con cambios(puesto que me gustan)  y también admiro a quienes lo llevan a cabo de forma espectacular.

Las últimas pinceladas de este óleo de opinión las voy a dedicar a una aclaración bastante personal y profunda. En estos últimos años nuestra Semana Santa se ha dejado llevar ,también de manera comprensible por la moda del momento, por marchas tanto de palio como de misterio que recurren a una rítmica llamémosla “facilona”, por supuesto que son grandes composiciones musicales pero vamos a intentar  dar una mayor variedad a las obras que se interpretan en nuestras calles, no recurramos siempre a estas marchas para levantar el aplauso en los lugares mas concurridos, intentemos incorporar esas marchas con sabor añejo para que nunca se pierda ese “clasicismo” y nuestra Semana Santa se convierta en un auténtico abanico musical donde tengan cabida tanto las marchas “clásicas”   como las de nuevo cuño.

Jesús Luque Caparros.

Autor: Jesús Luque Caparros
Joven Cofrade pero desde niño vinculado a la Semana Santa, Capataz del Misterio de Oración, del Perdón y de la Virgen de la Soledad, fue pregonero juvenil, destacando en escritos y colaboraciones en revistas y publicaciones de Hermandades.
13 de noviembre de 2011, 23:18
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